sábado, 2 de noviembre de 2013

Supermercado espiritual

Ya lo decían los miembros de la Escuela de Frankfurt allá por los años 40: el capitalismo nos enseña a interiorizar el consumo de tal manera que al final todo cae bajo sus redes: el conocimiento, el arte, las relaciones personales...

Los artistas ya no investigan y crean libremente sino que sus obras están condicionadas por el mercado... necesitan vender sus "productos" para poder seguir creando. Los criterios los ponen los compradores,  de esa manera el arte pierde su potencial de anticiparse a los tiempos, de remover conciencias y ser incómodo... sólo interesa ser rentable... Así el artista pierde su creatividad, su esencia y se convierte en un mero productor de obras en serie....

Las relaciones personales se superficializan, buscamos en agencias de citas o en bares a  personas con las características que nos gustan, como si fueran productos de supermercado; elegimos la que nos parece más adecuada; la probamos y si no nos gusta, la cambiamos por otra... Por ello nos sentimos solos y vacíos pese a estar rodeados de miles de personas...

El conocimiento se convierte en una mera acumulación de títulos, de nombres rimbombantes, de cursillos exprés donde creemos que podemos aprender cualquier cosa en unas pocas horas... Y así el volumen de nuestra ignorancia crece de manera inversamente proporcional al tamaño de nuestro currículum...

Es difícil luchar contra este sistema  porque cuando hay un movimiento espontáneo capaz de desestructurarlo, enseguida lo mercantiliza, lo absorbe... lo convierte en un cliché que se puede comprar... se hacen camisetas, anuncios.... se convierte en moda....

Y lo mismo sucede con las enseñanzas que nos permiten descubrir nuestra espiritualidad... técnicas que podrían ayudarnos a conocernos a nosotros mismos y liberarnos de los condicionamientos que nos empujan a consumir...

Por eso proliferan por todas partes escuelas y  maestros que nos venden la felicidad a cambio de un curso on line, que te hacen maestro de reiki en tres fines de semana, que te prometen que vas a conseguir todos tus deseos con muy poco esfuerzo y a cambo de un módico precio...

Esto alimenta el picoteo espiritual, personas dispuestar a hacer todo tipo de cursillos creyendo que cuantos más  títulos se tengan, más cerca está uno de la iluminación... pero que cada vez se encuentran más perdidos porque en realidad no han profundizado en ninguna de las enseñanzas....

Para mí, las técnicas son como barcas... cuando aprendes a usarlas pueden llevarte a la orilla que anhelas, esa orilla que está dentro de tí y que nadie puede venderte... Pero las técnicas en sí no son importantes, son sólo un instrumento que te conduce a un estado interno... Así que en lugar de elegir una buena barca y practicar con ella hasta alcanzar el otro lado, el picoteo te lleva a saltar de barca en barca... a elegirlas por el precio, el color o la forma... y no por su capacidad de navegar....

La barca no es importante, incluso con un trozo de madera puede la persona que se concentra y se lo toma en serio, llegar a cualquier parte....

No se puede comprar el conocimiento de uno mismo, no puede conseguirse nada si no se practica y se profundiza...  uno no es más espiritual  por hacer muchos cursillos, conocer muchas técnicas, publicar poemillas con ideas religiosas en las redes, vestir de blanco, ser vegetariano , llevar una sonrisa impostada o tener un puñado de frases cliché por conversación....

lunes, 28 de octubre de 2013

Reiki NO es algo esotérico, mágico, religioso ni peligroso.

De vez en cuando me llega algún comentario de alguien que afirma que Reiki es peligroso o que ha tenido alguna mala experiencia...

En esos momentos siempre pienso que esa persona ha tenido la desgracia de conocer Reiki de la mano de alguien perturbado que usa la técnica para conseguir dinero, alimentar su ego o dar alas a sus delirios... y me dan ganas de invitarla para mostrarle que Reiki es otra cosa, que no tiene nada que ver con ninguna creencia, religión, ni dogma... y que, por sentido común, no puede ser peligroso sentarse en una buena postura, respirar profundo y calmar la mente... Me dan ganas de pasarle los cientos de estudios neurocientíficos que demuestran la efectividad de la meditación y técnicas afines en el bienestar de todos los que lo practican.

Pero entiendo que no todo el  mundo ve Reiki como lo veo yo. Yo lo he aprendido como una técnica que potencia una capacidad natural que tenemos todos los seres vivos que es la de conectarnos con nuestro entorno y sentirnos en unidad con todo lo que existe... Como una herramienta que me ayuda a mirar dentro, a tomar conciencia de mis condicionamientos y obstáculos y me empuja a superarlos y a encontrarme a cada paso con mi verdadera esencia... a ir liberándome de ese personaje que he construido con el tiempo y que no sabía que me estaba haciendo sufrir tanto... de  manera que cada día me siento más libre, más feliz, más sencilla, más despojada de todo lo que no es importante....

Pero es cierto que también hay gente transmitiendo Reiki desde otros puntos de vista... a estas alturas he oído casi de todo... profesores que asustan a sus alumnos diciéndoles que si no usan determinados símbolos se conectarán con energías oscuras, terapeutas que te aseguran que tienes el chip de un alienígena maligno insertado en el cerebro y del que ellos te liberarán por el módico precio de 80€ (esto me lo contó una persona real, no me lo invento). En general seres que usan Reiki como excusa para aprovecharse del tiempo, energía, dinero de otros que están tan mal que se fían de cualquiera, que se agarran a cualquier cosa... todo esto existe tambien.

Forma parte de una etapa en la historia de Reiki en el que ha sido malinterpretado y asociado a ideas o prácticas que no tenían nada que ver con la técnica... la ignorancia es muy atrevida y muy dañina... hay mucha gente (algunos con buena intención, otros totalmente perturbados) difundiendo ideas erróneas ... incluso más de una vez hemos pensando cambiar el nombre a lo que hacemos para no tener nada que ver con esas escuelas....

Aunque finalmente hemos elegido centrarnos en difundir una visión saludable y sencilla de Reiki y siempre animamos a nuestros alumnos a ser críticos, a no creerse nada de lo que se les diga, a que comparen, investiguen y sobretodo profundicen en sí mismos... que es donde están todas las respuestas.

Si quieres aprender Reiki (o cualquier otra cosa) infórmate, busca referencias, entrevístate con el profesor, mira si la persona te da confianza o te da mala espina... entérate de cómo se ha formado, de si más o menos practica lo que imparte... si la visión que tiene de la técnica no rechina con tu forma de pensar y ver el mundo... y si algo no te cuadra, sal corriendo y sigue buscando... porque hay más opciones...

Y si conoces a alguien que se aprovecha de otros con Reiki o cualquier otra cosa, denuncia, sin miedo...

Hay gente para todo en todos los ámbitos... pero sólo tu criterio interno puede protegerte de los que quieren aprovecharse de tí... ya sea que quieras aprender Reiki, Yoga, inglés o macramé... Las técnicas no son peligrosas en sí mismas, pero puede que las personas que las usan tengan intereses ocultos...






sábado, 26 de octubre de 2013

Reiki: una fantástica herramienta para ser más feliz.

La mayor parte de la gente cree que Reiki es una técnica de imposición de manos y quizás por ello piensan que es útil sólo para terapeutas.

Es cierto que Reiki puede ser usado como efectiva terapia para remover bloqueos e ir alcanzando el equilibrio poco a poco, pero originalmente fue creado como herramienta para alcanzar la felicidad.



"A través de Reiki, primero se vuelve saludable al ser humano y luego se incrementan la paz mental y la alegría de vivir.

Hoy día todos necesitamos la mejora y la reestructuración de nuestras vidas a fin de poder librarnos a nosotros y  a nuestros semejantes de la enfermedad y del sufrimiento emocional." (Mikao Usui. Creador de Reiki. Entrevista).
 


Probé Reiki por primera vez a través de una sesión que me hizo una amiga, unas horas antes había tenido una crisis de ansiedad . Era bastante escéptica, pero me sentía tan vacía en esos momentos de mi vida que acepté la ayuda. 

Durante la sesión percibí unas ondas de energía que me subían de los pies a la cabeza y un bienestar increíble que me sumió en un profundo sueño... A la mañana siguiente desperté con una felicidad indescriptible, una sensación de unidad con todo lo existente, una plenitud y alegría totalmente desconocidas...  

Esa sensación no sólo me duró varios días sino que a partir de ahí mi vida fue cambiando poco a poco, desde dentro... empecé a elegir otro tipo de comida, de hábitos, de trabajos, de actividades...

En cuanto tuve la ocasión comencé a aprender Reiki...  y se inició una maravillosa aventura de autoconocimiento y un camino hacia un mayor bienestar y felicidad...

He probado muchas herramientas en mi vida, pero ninguna tan sencilla y efectiva como Reiki, por eso con el tiempo decidí que dedicaría la mayor parte de mi tiempo a difundirla y compartirla... y aquí sigo...